El aceite de mango mantiene la hidratación y restituye la luminosidad natural de la piel usándolo de 3 a 4 veces por semana. Proteje la piel de signos de envejecimiento, combate arrugas y se recomienda para todo tipo de piel.
Reduce las estrías, disminuye el ardor en quemaduras ya que es calmante y relajante.
Tiene una acción nutriente y emoliente sobre la piel. Y en el cabello ayuda con la puntas partidas.